Tómese el tiempo para vacunarse contra la influenza.

  • Los CDC recomiendan una vacuna contra la influenza anual como primera medida de prevención, y la más importante, a la hora de reducir su riesgo de sufrir influenza y sus posibles consecuencias graves.
  • Las vacunas contra la influenza ayudan a reducir la carga de casos, hospitalizaciones y muertes por influenza para el sistema de atención médica todos los años. (Leer más sobre beneficios de la vacuna contra la influenza.)
  • También se ha demostrado que la vacuna contra la influenza reduce la gravedad de la enfermedad de las personas que se vacunan e igual se enferman.
  • Esta temporada, todas las vacunas contra la influenza están diseñadas para proteger contra cuatro virus de la influenza. (Visite Selección de virus para vacunas para ver la composición de vacunas de esta temporada).
  • Todas las personas de 6 meses de edad o más deben recibir la vacuna anual contra la influenza, idealmente hacia fines de octubre, pero también es importante vacunarse incluso después, mientras los virus siguen siendo una amenaza para su comunidad.
  • La vacunación de las personas con mayor riesgo de presentar complicaciones graves por la influenza es particularmente importante para reducir su riesgo de enfermedad grave.
  • Las personas con mayor riesgo de presentar complicaciones graves a causa de la influenza incluyen a niños pequeños, personas embarazadas, personas con ciertas afecciones crónicas como asma, diabetes o enfermedad cardiaca y pulmonar, y personas de 65 años de edad o más.
  • Asimismo, la vacunación es importante para los trabajadores de los cuidados de salud, y para otras personas que conviven o cuidan a personas con alto riesgo para evitar transmitirles la influenza. Esto es particularmente importante para las personas que trabajan en establecimientos de cuidados a largo plazo, que albergan a muchas de las personas más vulnerables a la influenza.
  • Los niños menores de 6 meses corren mayor riesgo de enfermarse gravemente a causa de la influenza, pero son demasiado pequeños para vacunarse. En cambio, las personas que cuidan a bebés sí deben vacunarse.

Tome medidas preventivas todos los días para detener la propagación de microbios.

  • Tome otras medidas de prevención, además de vacunarse, que pueden ayudar a reducir la propagación de virus como los de la influenza.
  • Evite el contacto cercano con personas que estén enfermas.
  • Si está enfermo, limite el contacto con otras personas tanto como sea posible para evitar transmitirles la infección. Para la influenza, los CDC recomiendan que las personas se queden en casa por al menos 24 horas una vez que cede la fiebre, excepto para ir al médico o por otra necesidad. La fiebre debería desaparecer sin necesidad de utilizar medicamentos para bajar la fiebre.
  • Cúbrase la boca al toser o estornudar.
  • Cúbrase la nariz y la boca con un pañuelo al toser o estornudar. Arroje el pañuelo a la basura luego de utilizarlo.
  • Las mascarillas también pueden ayudar a reducir la propagación de virus respiratorios. Es posible que se pida a las personas que están enfermas que usen una mascarilla para proteger a otras personas, pero una mascarilla también puede proteger a la persona que la usa. Esto podría ser especialmente importante si corre mayor riesgo de presentar complicaciones graves por la influenza.
  • Lávese las manos con frecuencia con agua y jabón. Si no hay agua y jabón, use un limpiador de manos a base de alcohol.
  • Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca. Los gérmenes se diseminan de esta manera.
  • Limpie y desinfecte las superficies y los objetos que puedan estar contaminados con los virus que causan la influenza.
  • El virus en el aire puede propagarse entre las personas más fácilmente en lugares cerrados que al aire libre. Mejorar la calidad del aire, por ejemplo abriendo ventanas o usando purificadores de aire, puede ayudar a reducir la cantidad de virus a la que está expuesto.